EL ESTUDIANTADO EN EL CORAZÓN DEL PUEBLO
EL ESTUDIANTADO EN EL CORAZÓN DEL PUEBLO
A 55 años de las heroicas jornadas del 21 de noviembre de 1957
Por Wladimir Abreu
(Publicado por primera vez en
Tribuna Popular el 2 de noviembre de 2012, se le hicieron modificaciones de estilo)
La ignorancia es una forma peculiar
de dominación por eso Hoy cuando amplios sectores de jóvenes y estudiantes
hijos de trabajadores no saben que significa el DÍA DEL ESTUDIANTE, comprendemos
que la derecha ha hecho su tarea.
Algunos de ellos, el 21 de
noviembre, tararearan la canción “Que vivan los estudiantes”, de Violeta Parra,
que por supuesto ellos ni conocen, o algún estudiante despistado de una de nuestras universidades- públicas
o privadas- pensara que es letra de Jon Goicoechea, o como escuche de los
mediocres labios de algún “dirigente estudiantil” derechista carabobeño: “Pana, Soledad Bravo va
a cantar un concierto con Miguel Otero Silva”, Sin Comentarios.
El 21 de noviembre no es un simple
día de fiesta estudiantil, ni otra excusa para no ir a clases o la oportunidad
de mostrar una miniteca en la Universidad. No es ser mojigato, ni plantear
cercenar el derecho de los jóvenes a la alegría, pero el 21 de noviembre no es
cualquier día, es “EL DIA DE LOS ESTUDIANTES VENEZOLANOS”.
Los heroicos sucesos del 21 de noviembre de 1957 no merecen ser secuestrados
por la derecha proimperialista, que fue combatida en esa época por los
estudiantes venezolanos.
El 21 de noviembre de 1957, los estudiantes
de la UCV y principales liceos de Caracas, aplicando las resoluciones de la
Junta Patriótica, inician la lucha callejera contra la dictadura del General
Marcos Pérez Jiménez.
Por mucho tiempo la resistencia
contra la dictadura se efectuó en el marco de la más sigilosa clandestinidad;
la policía de la dictadura desarticula buena parte del aparato clandestino de
AD, y aplasta cualquiera desafección contra la dictadura; solo el PCV y su
Juventud Comunista logran sobrellevar y evadir los golpes policiales. Por ejemplo
de 1950 a 1958 Tribuna Popular logra salir al público y nunca la dictadura
logro atrapar al equipo editor, a pesar
de la orden expresa de Pérez Jiménez de destruir de cualquier manera a
Tribuna Popular.
El volante clandestino las
reuniones secretas, el furtivo graffiti en una pared serian por muchos años las únicas
maneras de combatir la dictadura, en tanto las fuerzas democráticas y populares
acumulan fuerzas y unidad de acción en
contra de la dictadura.
En la recen construida Ciudad
Universitaria de la UCV, en la mañana del 21 de Noviembre de 1957, con la
Juventud Comunista a la vanguardia, se convoca una Asamblea general de
estudiantes en la plaza del rectorado, para denunciar los crímenes de la
dictadura, se llama a los estudiantes a luchar con todas las fuerzas posibles
por el derrocamiento de la dictadura.
En esa asamblea los estudiantes
deciden salir a Plaza Venezuela y enfrenarse con la policía y la tenebrosa
Seguridad Nacional. La piedra, la bandera nacional, la consigna y el coctel
molotov serán las armas fundamentales en esta desigual gesta revolucionaria;
que marcaría el comienzo del fin de la dictadura. La represión es brutal, más
de 200 estudiantes y profesores serán sistemáticamente detenidos y torturados por la SN.
Antonio José “Caraquita” Urbina,
Chela Vargas, Hilarión Cardozo, Ramón Espinoza,
Alejandro Arratia, Julio Escalona, Emilio Santana, fueron los
principales dirigentes estudiantiles de
la jornada, representativos delas fuerzas juveniles de le época que se enfrentaban
a la dictadura, JCV, las juventudes de AD,
COPEI y URD; quienes conformarían el FRENTE UNIVERSITARIO.
Los estudiantes de la UCV, el
Liceo Fermín Toro, la Escuela José Antonio Caro, toman la sede del Congreso de Cardiología
que en esos momentos sesionaba en la recién inaugurada sede del Aula Magna de
la UCV. La Seguridad Nacional y la policía ingresan al recinto universitario, produciéndose
violentos enfrentamientos.
Prácticamente desde el 21 de
Noviembre se rompe la monolítica fortaleza de la dictadura, de allí hasta el 23
de enero de 195, la dictadura no tendría respiro; dice Rodríguez Bauza; “Los hechos de noviembre del 57 tuvieron cierto impacto en la sociedad y en
el régimen, pero hubiera sido ilusorio atribuirle mayor efecto porque, al no
haber libertad de prensa, aquello no se supo lo suficiente. Y las
organizaciones tampoco teníamos mucho poder. La más fuerte era la Juventud Comunista
y teníamos 200 miembros. El caso es que, en el primer momento, la comunidad no
se unió a la lucha. La gente se limitaba a observar que “los muchachos están peleando
“pero la actitud generalizada era que los muchachos estaban allá y la gente
estaba acá. Sin embargo, inmediatamente se produjo un gran respeto y cariño por
los estudiantes. Eso se vio claramente después del 23 de enero”.
Hoy nuestro deber es estudiar y
rescatar la verdadera esencia revolucionaria
del 21 de noviembre de 1957, su influencia en la historia nacional y cuál debe
ser su significado para la reorganización del movimiento estudiantil y juvenil venezolano,
el que se necesita para la revolución socialista-comunista.
Hoy cuando el fascismo acecha y
quieren llevarnos al pasado a través de un golpe de estado reaccionario, el
llamado al movimiento estudiantil es a la lucha antifascista y a la lucha
revolucionaria.
Hoy se hace un llamado a todos
los estudiantes a luchar contra aquellos que pretenden convertir los gremios estudiantiles
en guaridas del golpismo reaccionario. La convocatoria es a convertir las universidades en centros para
de debate científico, en espacio para la creación de ciencia y tecnología para
el desarrollo de la patria.
Hoy es un deber insoslayable que
los jóvenes venezolanos luchen por una universidad que deje de ser una “escuelita”
y se convierta en la “CASA QUE VENZA LAS SOMBRAS”.
Debemos crear una verdadera
plataforma revolucionaria, científica, marxista de la universidad que necesita
la clase obrera en la monumental tarea
de conquistar el socialismo-comunismo.
VIVA EL 21 DE NOVEMBRE DIA DEL
ESTUDIANTES.
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